Algonquin Park
Toronto, Canada, 24 de septiembre de 2006
Aloha familia!
Ciertamente, he tenido el blog un poco abandonado en la última semana. Mis más sinceras disculpas. Pero ha habido muchos motivos... buenos y no tan buenos.
Los no tan buenos (siempre se saca algo positivo de ellos, de ahí la definición al estilo botella medio llena): mi habitación seguía infestada de bichitos (aquí los llaman bed bugs, nada que ver con ETS´s, que conste!). Así que he estado llamando al fumigador, limpiando todos los rincones y lavando sábanas, edredones y almohadas. Hace unos días decidí tirar el colchón que había en la habitación y comprar uno nuevo, prefiero perder el dinero que mi epidermis de tanto rascar. Y desde entonces todo parece ir bien, ya me siento como en casa.
Por cierto, mi dirección (se aceptan cartas, postales, flores, bombones, cheques, etc) es:
Los paisajes son preciosos y aunque no vimos osos o alces, la naturaleza rebosa vida.. vida y caducidad al mismo tiempo, porque ya es la fecha en la que los árboles empiezan a ponerse rojos y las hojas a caerse. Caen tantísimas que a veces, desde el interior de la tienda, piensas por el sonido que está lloviendo.
El domingo hicimos una pequeña ruta por el alrededor de algunos lagos, y vimos las presas que los castores hacen. Tampoco vimos ninguno, pero las presas son increíblemente resistentes y bien construidas (deformación profesional, lo siento).
Y nada, parte de la culpa de que no haya escrito también la tiene la universidad. Ya casi me había olvidado de que venía aquí a estudiar, así que cuando las clases comenzaron, hace un par de semanas, tuve un pequeño momento de shock y estrés, pero parece que está superado.
Otros buenas excusas son: un musical de Monty Python , divertidísimo; una fiesta en mi casa, desmadre... y alguna que otra actividad de ocio más. Pero eso, que tambiñen estoy estudiando. Mi último trabajillo ha sido una crítica a un discurso de George W. Monkey Bush sobre Kyoto y cambio climático.
El próximo hito en la carrera canadiense es la Oktoberfest (sí, estos alemanes están por todas partes). Esto será dentro de un par de semanas en un sitio llamado Kirchner, no muy lejos de Toronto.
Os adjunto algunas fotillos de las primeras semanas en Toronto, para que vayáis familiarizandoos con los caretos de mis amigüitos de aquí.
Besos y abrazos,
-curro-
Aloha familia!
Ciertamente, he tenido el blog un poco abandonado en la última semana. Mis más sinceras disculpas. Pero ha habido muchos motivos... buenos y no tan buenos.
Los no tan buenos (siempre se saca algo positivo de ellos, de ahí la definición al estilo botella medio llena): mi habitación seguía infestada de bichitos (aquí los llaman bed bugs, nada que ver con ETS´s, que conste!). Así que he estado llamando al fumigador, limpiando todos los rincones y lavando sábanas, edredones y almohadas. Hace unos días decidí tirar el colchón que había en la habitación y comprar uno nuevo, prefiero perder el dinero que mi epidermis de tanto rascar. Y desde entonces todo parece ir bien, ya me siento como en casa.
Por cierto, mi dirección (se aceptan cartas, postales, flores, bombones, cheques, etc) es:
Curro Zuloaga
152, St. George Street
Toronto, Ontario
M5S 2E9
CANADA
Los buenos motivos: el fin de semana impresionante, con todos mis nuevos amigüitos de aquí. lquilamos dos coches y nos hemos ido 10 personas a Algonquin Park, parque natural provincial de Ontario. Si conocéis el estereotipo de paisaje canadiense, eso es lo que me rodeaba el fin de semana pasado. Acampamos en el parque, en camping organizado pero distinto del estilo masificación que yo conocía hasta ahora. Al lado había un lago, el Canisbay Lake, donde alquilamos unas canoas y remamos durante el sábado.152, St. George Street
Toronto, Ontario
M5S 2E9
CANADA
Los paisajes son preciosos y aunque no vimos osos o alces, la naturaleza rebosa vida.. vida y caducidad al mismo tiempo, porque ya es la fecha en la que los árboles empiezan a ponerse rojos y las hojas a caerse. Caen tantísimas que a veces, desde el interior de la tienda, piensas por el sonido que está lloviendo.
El domingo hicimos una pequeña ruta por el alrededor de algunos lagos, y vimos las presas que los castores hacen. Tampoco vimos ninguno, pero las presas son increíblemente resistentes y bien construidas (deformación profesional, lo siento).
Y nada, parte de la culpa de que no haya escrito también la tiene la universidad. Ya casi me había olvidado de que venía aquí a estudiar, así que cuando las clases comenzaron, hace un par de semanas, tuve un pequeño momento de shock y estrés, pero parece que está superado.
Otros buenas excusas son: un musical de Monty Python , divertidísimo; una fiesta en mi casa, desmadre... y alguna que otra actividad de ocio más. Pero eso, que tambiñen estoy estudiando. Mi último trabajillo ha sido una crítica a un discurso de George W. Monkey Bush sobre Kyoto y cambio climático.
El próximo hito en la carrera canadiense es la Oktoberfest (sí, estos alemanes están por todas partes). Esto será dentro de un par de semanas en un sitio llamado Kirchner, no muy lejos de Toronto.
Os adjunto algunas fotillos de las primeras semanas en Toronto, para que vayáis familiarizandoos con los caretos de mis amigüitos de aquí.
Besos y abrazos,
-curro-
Foto: de izquierda a derecha: Nathalie, Kim, Camille, Johanna, Oliver, Claire, Lena, yo, Steffen y Ben, junta al Canisbay Lake en Algonquin Park